28 de septiembre de 2014

Tales of fairies

Y aquí dejo otro, esta vez es una mezcla del anime Tales of Symphonia y Fairy Tail. :)






   El chico de pelo castaño alzó la vista al cielo. Las nubes blancas y delgadas cruzaban el firmamento, colocándose frente al sol como si fueran extraños soldados protegiendo un fuerte. El viento sacudió las dos coletas que caían tras su espalda y las telas de las katanas que portaba envainadas a cada lado de la cintura.
   La chica rubia de ojos tan claros como el cielo se clavaron en él con la preocupación reflejada en su rostro.  Su piel blanca parecía aún más clara bajo la luz luminosa del sol.
-¿Crees que nos ayudarán, Lloyd? -preguntó. Conforme terminó de hablar, dejó que un par de lágrimas escaparan de sus ojos, dos hilos transparentes que formaron la silueta de sus mejillas-. Si ellos no...
   El supuesto Lloyd ladeó la cara hacia ella y esbozó una enorme sonrisa.
-Claro que sí. Según hemos oído, ellos son como nosotros, ¿cierto? También ayudan a los que necesitan ayuda, y nosotros la necesitamos. Además, esto también les acabará afectando... -le pasó un brazo por los hombros y la miró con amor-. Vamos, Collete...no llores... Todo estará bien, ¿sí? ¡Estando juntos nada podrá salir mal, y menos con ellos!
   Collete trató de sonreír, pero las lágrimas seguían cayendo por su rostro. Su cabello rubio casi le hacía daño en los ojos a Lloyd, pero él no diría nada. Le encantaba todo de ella, sobretodo su pelo.
-Pero los otros siguen allí... Espero que estén bien -murmuró, y clavó la vista en el edificio de piedra que se extendía frente a ellos, esa colosal estructura llena de banderas de colores que ondeaban al viento-. Lo conseguiremos. Tenemos que hacerlo por todos. Tenemos que mantenernos fuertes. Siempre hemos salido bien de todo lo que hemos pasado, ¿no es así?
   El chico castaño se reajustó el abrigo rojo que cubría su cuerpo y apretó el puño que no rodeaba a su compañera. Sus ojos mostraban una determinación de acero.
   Esbozó una sonrisa llena de confianza y, aunque tenía miedo, agarró de la mano a Collete y tiró de ella hacia  el impotente edificio que portaba la bandera naranja, esa que tenía el símbolo del hada estampado. Tenía que ser eso lo que estaban buscando, ese extraño "gremio" de magos que se dedicaban a realizar trabajos por dinero, aunque también había escuchado que ellos eran diferentes. Según los rumores, ellos ayudaban a los suyos. Ellos prestaban una mano. Eran valientes. Luchaban por los que no podían hacerlo.
   Y él no podía hacerlo, por mucho que le doliera aceptarlo. Lo que estaba ocurriendo en su mundo era demasiado para él y para sus compañeros, mucho más grande y aterrador que cualquier cosa que había visto antes. Fue una suerte haber encontrado ese portal que conectaba su mundo con este; sin él, Lloyd estaba seguro de que habrían estado perdidos.
   Pero ahí estaban, en esa extraña dimensión donde la magia no salía de las exferas, sino que era algo natural que era usado en el ámbito cotidiano. Le resultaba tan extraño todo eso... Notaba en la piel que este lugar no era el mundo donde él había crecido. Ni siquiera había sentido eso en Tethe'alla.
   Las puertas del edificio estaban abiertas. Pese a que se encontraba en el exterior, fue capaz de percibir muchas voces que provenían desde dentro, restos de conversaciones, risas, gritos. Parecía que ellos no tenían preocupaciones, por lo que veía. Sentir la felicidad de esas personas le llegó al alma, y por un momento recordó la razón por la que había ido hasta tan lejos: fuego por todos lados, su pueblo gritando, sombras enormes y aterradoras surcando el cielo.
   La oscuridad tiñó su rostro por un momento, pero algo le evadió de los recuerdos. Collete le apretaba la mano con fuerza. Lo miró con una sonrisa tranquilizadora en el rostro, y tiró de su brazo.
-¿Vamos? -dijo ella, con esa voz tan suave y dulce que él había llegado a perder hacía un tiempo.
   Sonrió. Sus botas negras comenzaron a moverse hacia la puerta.
   Llegaron al umbral; los sonidos se hacían cada vez más intensos.
   El perfume de Collete le trajo a la mente recuerdos de su mundo. Estaban ahí para conseguir ayuda. Estaban ahí para salvarlo. Tenían que lograrlo.
   Lloyd cogió aire despacio, y, junto a su compañera, cruzaron la puerta y entraron dentro del gremio. Dentro de Fairy Tail.




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2 comentarios:

  1. Hola, me gusta la manera en que describes la situación y las emociones de los personajes, pero no he entendido bien la historia, no por tí, me gusta tu manera de narrar, es tal vez porque no conozcía el anime Tales of Symphonia.

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    1. Es que sin haber visto la serie de ToS no se puede entender, sorry xD

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